De una cana blanca hacia un arcoiris
Desperté y lo primero que vi en el espejo fue una nueva cana. Pero que de especial tiene esta cana? Pues, es el echo de que cumplí 27 y es la número 17 en toda mi cabeza; en ella vi pasar mi vida, mi trabajo, mi carrera profesional y todo lo que hasta ahora es parte de mí y lo que ha colaborado a que yo sea lo que soy ahora mismo. Ver desde aquel pequeño niño que jugaba con sus preciados juguetes, sin tener la preocupación de lo que podría venir después; hasta el anciano que se siente orgulloso por todo lo que ha llegado a superar en la vida, para estar hoy donde estamos los tres. Mi pasado, mi presente y mi futuro. Esta cana número 17 representa mi libertad, a ser yo mismo, a mostrarme al mundo como soy y de lo que estoy hecho; a compartir todos esos sueños que hemos construido con el paso del tiempo. A vivir sin enconderme o reprimir gustos, porque sé lo que valgo y a donde quiero llegar, se de las personas que me rodean y de todas aquellas a quien quiero con el alma. Mi cana 17 es